¿Usted busca una solución eficaz para conservar fácilmente una bolsa de queso rallado por ejemplo? ¡Entonces, no busque más tenemos la solución!
Para esto, se necesitan:
- una bolsa que usted quiere conservar (para esta demostración, utilizamos una bolsa de harina de almendras, pero este truco funciona con cualquier bolsa)
- tijeras
- una botella de plástico vacía
Empezamos cogiendo la botella de plástico y cortándola a nivel del cuello de botella con las tijeras.
Dejamos el resto de la botella a un lado y desenroscamos el cuello de botella. Hacemos un retorcido con la apertura de la bolsa y liberamos bien el plástico alrededor del cuello de botella. Para cerrar, solamente nos falta enroscar la botella.
¡¿Astucioso, verdad?!
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