A sus 32 años, el mejor portero del mundo ha decidido que ya tiene edad suficiente para hacerse cargo él mismo de sus negocios. Y así lo hizo, según consta en el Registro Mercantil de Madrid, con la sociedad Ikerca S.L, al revocar los poderes que sus padres tenían en ella hasta ahora. Casillas le ha dado a sus padres varios inmuebles y el 40% del valor de la sociedad que compartían, una cifra que supera los cinco millones de euros.