Un tribunal ruso ha condenado este lunes a tres personas a cadena perpetua y a una cuarta a diez años de prisión por su relación con el atentado suicida que acabó con la vida de 37 personas en el aeropuerto moscovita de Domodedovo, en enero de 2011. Se les acusa de ayudar al terrorista a viajar desde Ingushetia hasta Moscú y de suministrarle un cinturón explosivo y alojamiento.