La ciudad de Nueva York acogió la gala que premia los mejores productos televisivos de todo el planeta. Un galardón quizás no tan prestigioso ni esperado como su hermano mayor estadounidense pero que sigue atrayendo a un gran número de estrellas.
Como el británico Sean Bean, más conocido por sus papeles en “El Señor de los Anillos” o “Juego de Tronos”, y que se impuso en la categoría de mejor actor por su actuación en la serie británica “Accused”.
La diva brasileña Fernanda Montenegro se llevó el Emmy a la mejor acriz por su interpretación en la ficción televisiva “Doce de Mae”.
La llamada “Dama del teatro brasileño” ,de 83 años, estuvo a punto de ganar el Óscar en 1999 con la película “Estación Central de Brasil”.
Uno de los momentos más potentes de la gala llegó cuando el actor que interpreta a Spock en la última película de Star Treck entregó el premio honorífico a uno de los hombres más importantes del panorama televisivo de los últimos años, el creador de “Perdidos”, J. J Abrams.
El premio a la mejor serie dramática fue para la producción francesa “Les Revenants”, una historia de muertos que misteriosamente regresan a la vida.