Los flashbacks son uno de los síntomas de más largo plazo y más devastadores del abuso infantil. Un flashback ocurre cuando se mira un evento que ocurrió en el pasado desde el presente, con una nueva mirada. Ese evento fue un abuso tremendamente doloroso. Cuando miramos hacia atrás vemos cosas que nunca antes vimos. Puede que sea la primera vez que te des cuenta que lo que viviste fue un abuso y que no te lo merecías. Puede que sea la primera vez que veas cómo y cuánto te hirió. Muchas sobrevivientes de abuso sexual tienen flashbacks. Estos flashbacks son como revivir el abuso original y pueden tomar la forma de imágenes, sonidos, olores, sensaciones corporales, sentimientos o ausencia de los mismos (anestesia). Muchas veces no hay memoria visual o auditiva. Se puede tener la sensación de pánico, de estar atrapada, de sentirse impotente.