Crece la tensión en los Altos del Golán entre Siria e Israel.

Un bombardeo de aviones israelíes contra complejos militares sirios ha matado a una persona y herido a siete en la provincia de Quneitra, fronteriza con el Estado hebreo.

Este ataque ha sido la respuesta a la explosión de una bomba artesanal, ayer, al paso de una patrulla israelí en los Altos del Golán, ocupados por Israel desde 1967. Cuatro soldados resultaron heridos.

El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha advertido de que su país responderá con la fuerza a cualquier agresión.

“Esos objetivos eran elementos sirios que no sólo permitían, sino que colaboraban en los ataques contra nuestras fuerzas. Nuestra política es muy clara, golpeamos a quienes nos atacan e intentamos frustrar la transferencia de armas por tierra, mar y aire… De vez en cuando nos vemos obligados a llevar a cabo operaciones agresivas, como ésta, para garantizar la calma”, ha dicho.

Lo cierto es que desde que comenzó el conflicto sirio, hace más tres años, los incidentes en la frontera entre ambos países son habituales. Aunque el de ayer supone el más grave para el Ejército israelí, con cuatro de sus militares heridos.