Barack Obama se encuentra en Seúl, segunda parada de su gira asiática. El presidente estadounidense ha visitado el Monumento a los Caídos de Corea del Sur y el palacio Gyeongbok; una visita marcada por la amenaza de una nueva prueba nuclear de Corea del Norte.

Obama ha advertido al régimen de Pyongyang de que un ensayo de este tipo sólo profundizará su aislamiento y que acarreará una respuesta firme de la comunidad internacional. Estados Unidos considera el programa nuclear norcoreano una amenaza para sus aliados en la región, Seúl y Tokio, y para la seguridad norteamericana.

Corea del Norte, por su parte, ha condenado la visita de Obama a la península asiática. Estima que ésta no hará sino aumentar las tensiones.

Durante su gira asiática, el presidente estadounidense recalará también en Malasia y Filipinas.