Sobornos, corrupción y mentiras en la FIFA. El escándalo por la elección de Catar como sede del Mundial 2022 crece como la espuma. El periódico británico Sunday Times asegura que Mohamed Bin Haman, exdirigente del fútbol catarí, sobornó con millones de dólares a varios representantes del fútbol internacional para que apoyaran la candidatura de su país.

El rotativo dice tener en su posesión miles de documentos que demuestran los sobornos de Haman por un total de 5 millones de dólares. De ellos, 1,6 millones habrían acabado en cuentas del ex vicepresidente de la FIFA, Jack Warner, y otros 200.000 en manos de los presidentes de 30 asociaciones de fútbol africanas.

El presidente de la FIFA Joseph Blatter ha reconocido que elegir a Catar como sede del mundial 2022 fue un “errror”, un país en el que en julio se alcanzan los 50 grados de temperatura. A eso se suma el escándalo sobre las terribles condiciones de trabajo en las obras del Mundial, donde, según distintas fuentes, ya han muerto cientos de nepalíes empleados como mano de obra barata.