Las inundaciones provocadas por las lluvias torrenciales han causado al menos 70 muertos en el norte de Afganistán. Hay, además, un número indeterminado de heridos y desaparecidos. El agua ha destruido numerosas viviendas y vías de comunicación.
Hace poco más de un mes, las lluvias torrenciales ya habían dejado unos 200 muertos y desaparecidos en el noreste de Afganistán y más de 2.000 fallecidos en los corrimientos de tierra que siguieron.