La aviación israelí ha retomado la ofensiva contra la Franja de Gaza tras un alto el fuego que ha durado seis horas.
Los ataques han tenido lugar después de que Hamás lanzara más de 70 cohetes contra Israel, a pesar de que el primer
ministro del país, Benjamín Netanyahu, había aceptado esta mañana el cese de la violencia propuesto por Egipto.
La aviación israrelí ha atacado la localidad
meridional de Jan Yunís, el barrio de Zaitum, en Gaza
capital, y el campo
de refugiados de Al Bureij.
“La declaración de Nettanyahu de un alto el fuego no tiene sentido para Hamás, porque no lucha por un alto el fuego sino para liberar al pueblo palestino de la opresión israelí. Oficialmente, Israel ha matado a 200 palestinos, pero sin duda alguna la cifra real es mayor”, comenta Sami Abou Zahri, portavoz de Hamás.
Los bombardeos israelíes han destruido centenares de viviendas y edificios desde el inicio de la operación ‘Margen Protector’.
“Los habitantes de Gaza estamos muriendo día tras día, mañana y tarde, y eso es injusto”, comenta un ciudadano de Gaza.
Otro dice que “hay unos derechos que defender. Queremos una tregua que ponga fin al bloqueo. Una tregua que traiga justicia y acabe con la situación que estamos viviendo”.
Los palestinos en Gaza el han llorado la muerte de cinco personas, entre las que se encuentra una niña de cuatro años, durante los últimos ataques israelíes.
Tras ocho días de hostilidades, cerca de 200 palestinos han muerto y más de 1.400 han resultado heridos.