La cólera y la pena crecen en Holanda a medida que se conocen las historias personales de los pasajeros del avión de Malaysia Airlines al tiempo que circulan informaciones sobre lo que está ocurriendo en Ucrania con sus restos mortales. El Gobierno holandés se reunirá este lunes con las familias de las víctimas: 193 de los 298 fallecidos eran ciudadanos holandeses. A la reunión es posible que también asistan los reyes Guillermo-Alejandro y Máxima.
En el aeropuerto internacional de Amsterdam un piloto nos dice: “Lógicamente yo vuelo cada semana y no es la primera vez que paso por encima de zonas problemáticas. Siempre doy por supuesto que no hay peligro, pero, al parecer, no es así. Y esa es otra razón para preguntarse qué ocurrió”.
“Creo que los políticos holandeses se han comportado de forma adecuada al mostrarse prudentes. Aún no se sabe qué pasó y creo que es mejor mantener una postura objetiva”, opina una mujer.
La mayoría de los partidos políticos holandeses, incluidos los que apoyan a la coalición de Gobierno, quieren que el Ejecutivo dé explicaciones sobre lo que ocurrió y está ocurriendo en Ucrania. El ministro de Exteriores holandés, Frans Timmermans, asegura que no descansará hasta llevar a los culpables del desastre ante los tribunales.