El descenso se produce un día después de que su filial, la aerolínea de bajo coste rusa Dobrolet, suspendiera todos sus vuelos debido a la entrada en vigor de las sanciones de la UE a Rusia.
Según la prensa local, el Gobierno del Kremlin podría responder a estas sanciones con la imposición de límites al tráfico aéreo de las compañías extranjeras que vuelan sobre territorio ruso.
En la actualidad, las aerolíneas europeas pagan a Aeroflot alrededor de 300 millones de dólares anuales por los derechos de uso de la ruta transiberiana, mucho más corta.