La agencia crediticia mantiene la calificación de la deuda gala en el segundo nivel más alto de su escala (AA), pero reduce su perspectiva a “negativa” debido al deterioro de su situación presupuestaria y las dificultades en llevar a cabo algunas reformas.
Reconoce, no obstante, aspectos positivos como el alto nivel de renta per cápita y productividad, la diversificación y la estabilidad del sector financiero.
En opinión de Standard & Poor’s la segunda mayor economía de la eurozona incumplirá con su objetivo de reducción del déficit y cerrará 2014 con un 4,4 %, seis décimas por encima de lo esperado, mientras que su Producto Interior Bruto ( PIB) crecerá en este período un 0,5 %, algo menos de la mitad que el año que viene.