En Antioquia, en 1990, un grupo paramilitar cometió un secuestro masivo que fueron llevados a una finca, después de lo cual nunca se les volvió a ver. Fue hasta el año pasado, tras realizar pruebas de ADN, que el Estado colombiano entrego siete de los 43 desaparecidos a sus respectivas familias. Las 36 restantes aún esperan justicia. teleSUR