Miles de personas han despedido a Nathan Cirillo en su ciudad natal. Miembros de su regimiento han custodiado el féretro por las calles de Hamilton, a orillas del lago Ontario.

La mujer y el hijo del cabo de 24 años han estado arropados por representantes de la clase política canadiense. Durante el funeral, el primer ministro Stephen Harper ha tenido palabras de aliento para el hijo de Cirillo.

“Que su hijo, el joven Marcus Daniel Cirillo, algún día encuentre consuelo en el hecho de que todo nuestro país mira a su padre con orgullo, con gratitud y con profundo respeto”, ha dicho Harper.

El hombre que disparó a Cirillo es Michael Zehaf-Bibeau, convertido al Islam y con problemas mentales. Abrió fuego contra él antes de dirigirse hacia el Parlamento de Ottawa, a unos centenares de metros del Monumento a los Caídos. En los pasillos del edificio, Zehaf-Bibeau fue abatido por las fuerzas de seguridad.