El Reino Unido limitará los intereses que se pueden cobrar para los préstamos al día, para impedir los abusos por parte de las empresas especializadas. La Autoridad para la Conducta Financiera anunció que, a partir de enero, no se podrá cargar más del doble del préstamo si éste no se devuelve a tiempo. Ahora, puede más que multiplicarse en los casos de retraso aunque las compañías hablen de un máximo anual del 5,8 por ciento.

“Está claro que es bueno que la Autoridad para la Conducta Financiera del Reino Unido se haya interesado por esto”, aprueba el consejero Bob Parker del Crédit Suisse. “Es justo investigar estas tácticas tan agresivas de venta de algunos prestamistas al día y sus extremadamente altos intereses”.

Recurrir a una de estas compañías que prestan a la espera de recibir el salario mensual para poder avanzar las compras se ha convertido en algo habitual entre los británicos ante los problemas de poder adquisitivo de una buena parte de la población. El propio regulador financiero prevé que los prestamistas perderán en torno al 42 por ciento de sus ingresos hasta un total de 536 millones de euros.