Una de las últimas jugadas del fiscal de la Nación, Carlos Ramos Heredia, antes de ser notificado oficialmente de su suspensión por seis meses del cargo por parte del Consejo Nacional de la Magistratura (CNM) fue ordenar el trasladado de 20 libros, que registraron las visitas que él y los otros fiscales supremos recibieron en los últimos cuatro años.