El juez constitucional emérito se ha comprometido a ser un árbitro imparcial, tras jurar ser fiel a la República y respetar lealmente la Constitución.
En el Palacio Montecitorio, sede de la Cámara de los Diputados, Mattarella ha destacado en su discurso de investidura que la lucha contra la mafia y la corrupción son sus prioridades absolutas. “La corrupción ha alcanzado niveles inaceptables. Y devora los recursos que podrían ser destinados a la ciudadanía” dijo.
Mattarella condenó el terrorismo y la violencia en nombre de la religión. E hizo referencia al drama de la inmigración.
“Las guerras, los atentados, las persecuciones políticas, étnicas y religiosas, las miserias y el hambre que generan las guerras producen grandes oleadas de refugiados. Esto es una urgencia humanitaria grave y dolorosa a la que debe hacer frente una Unión Europea más atenta, comprometida y solidaria”, añadió.
En su discurso, muy ovacionado, también exhortó a la clase política italiana a realizar con “