A menos de dos días de la entrada en vigor del alto el fuego, los combates prosiguen con la misma intensidad en el este de Ucrania.

El ejército ucraniano habla de al menos once soldados muertos y cuarenta heridos en las últimas 24 horas.

Los enfrentamientos con fuego de artillería se concentran en la zona de Debáltsevo.

“Hay combates en Logvínovo, el pueblo que los separatistas intentan tomar”, comenta este militar. “También hay enfrentamientos a lo largo de la carretera que conduce a Debáltsevo”.

Una región con un estratégico nudo ferroviario entre los dos grandes bastiones rebeldes, Lugansk y Donetsk, que los milicianos prorrusos pretenden arrebatar a las fuerzas de Kiev antes del domingo.

Por su parte, unos veinte civiles han perdido la vida en los territorios controlados por los separatistas. En Lugansk, al menos cuatro personas murieron y seis resultaron heridas en un ataque contra un café lleno de clientes.

“Camarada Presidente de Ucrania”, dice esta mujer. “¿Dónde