Los peatones en Nueva York recibieron más de lo que pidieron de Lady Gaga pues ella convirtió las calles en un set para filmar escenas de un comercial. La cantante de Born this Way filmó en la asiento trasero de un Cadillac dándole a los Neoyorkinos primera fila. Siempre una artista, Gaga claramente se vio cómoda actuando, tirando dinero al aire, cambiando su vestido azul a un chal amarillo y aplicándose el maquillaje.