Las elecciones legislativas de Israel, previstas para el próximo 17 de marzo, podrían deparar cambios, como un giro del Gobierno a la izquierda, si Netanyahu no consigue renovar mandato, y sorpresas de peso: si los sondeos no se equivocan, las urnas darán un protagonismo sin precedentes a los árabes israelíes.
Los representantes árabes en el Parlamento israelí, como Haneen Zoabi, en estas imágenes atacada durante un mítin electoral, son considerados por muchos de sus colegas como “enemigos en casa” y se convierten regularmente en blanco de todo tipo de ataques.
El último motivo de discordia es un proyecto de ley del Gabinete conservador de Netanyahu encaminado a reforzar el carácter judío del Estado de Israel. Para Zoabi, se trata directamente de una política de apartheid:
Haneen Zoabi. Diputada árabe en la Knesset:
“Desafiamos un proyecto sionista discriminatorio que define este Estado como un Estado judío que legaliza privilegios a los Judíos con respecto a los palestinos. Som