La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, se enfrenta a una nueva campaña de desprestigio impulsada por grupos políticos y mediáticos, además de partidos políticos de oposición. Durante un foro comercial, empresarios y sindicatos de criticaron el programa económico del gobierno de Brasil. Aunque la mandataria aceptó que el país atraviesa por un momento económico difícil, ello no implica que estén en crisis. teleSUR