Alibabá considera infundadas las acusaciones de Kering. El gigante chino del comercio electrónico ha menospreciado la demanda que la pasada semana presentó en su contra en Nueva York el grupo francés de lujo que gestiona marcas como Gucci, Balenciaga o Yves Saint Laurent. Y que le acusa de promover la venta de falsificaciones y de sacar un beneficio con ello.
Alibabá controla casi el 90% del comercio electrónico en China. Kering ya había presentado una demanda contra la firma asiática en 2014, pero al final la retiró tras llegar a un acuerdo con la otra parte para luchar contra las falsificaciones.