En un comunicado de la Conferencia Episcopal Venezolana, dado a conocer por el arzobispo de Mérida monseñor Baltazar Porras, esa institución manifiesta su preocupación por la falta de medicamentos, alimentos, fallas en los servicios de agua y luz, así como expresa asombro por la depreciación de la moneda y el encarecimiento de los productos.