Un simulacro de terremoto en Filipinas se transformó en un operativo real de rescate cuando dos de los voluntarios que participaban en la maniobra se desmayaron en pleno acto debido a su prolongada exposición al sol.
Uno de ellos fue el filipino Jerome de la Cruz, que permaneció bajo escombros simulados y expuesto al calor solar durante más de dos horas en Taguig City, sur de Manila. El voluntario fue trasladado en estado inconciente a un centro de salud.
Video cortesía de EFE