Yo respiro las nubes mensajeras
en el cielo esmeralda de tus besos;
tú me miras con ojos de peceras
donde nadan colores ya confesos.
Yo te escribo la brisa en una pluma
que acaricia tus días y tus noches;
tú proteges la magia de la espuma
que se esfuma si soplan los reproches.
Yo navego tu néctar victorioso
que me lleva por playas de topacio;
tú me esperas sin látigo celoso
que destruye la aurora del palacio.
Yo te entrego mi atmósfera de amor
tú me pagas con todo tu fervor.
Copyright © 2011 José Luis Calderón.