Un ciudadano belga de origen marroquí ha sido detenido cerca de Casa Blanca en el marco de la investigación de los atentados de París, que dejaron más de 130 muertos. Según las autoridades marroquíes, se trata de un excombatiente del Dáesh y del Frente Al Nusra que estuvo estrechamente ligado a algunos de los autores de los ataques terroristas que conmocionaron al mundo el pasado 13 de noviembre.
La pista del único autor conocido de la masacre que sigue con vida, Salah Abdeslam, se perdió en el barrio bruselense de Molenbeek. No está claro el grado de participación en los ataques del detenido, que resopnde a las iniciales J.A., pero sí que se fue a Siria con uno de los yihadistas suicidas que murió en París y que en aquel país fraguó amistad con el presunto cerebro de los atentados.