De esta manera los padres de Marta del Castillo entregaban en el Ministerio de Justicia un total de 1,4 millones de firmas para exigir que se repita el juicio por el asesinato en 2009 de la joven sevillana a la luz de las nuevas pruebas gracias a los servicios de un supuesto infiltrado. La familia de Marta denuncia que "de las cinco personas implicadas sólo una fue condenada", Miguel Carcaño.