El primer ministro francés Manuel Valls modera su reforma laboral para salvar la oposición de los sindicatos y de las asociaciones de estudiantes, que se habían mostrado unánimemente en contra.
El Gobierno socialista logró así que los sindicatos considerados “reformistas”, el principal de ellos la Confederación Francesa de Trabajadores (CDFT), cambiaran su oposición y anunciaran que examinarán el texto y consultarán con sus bases en los próximos días.
“Lo que me parece importante es que podamos avanzar. Evidentemente hay algunos que piden la retirada del texto: esto no es posible. Francia espera respuestas a cuestiones fundamentales que se plantea desde hace mucho tiempo”, ha dicho Valls.
Sin embargo, queda otro frente sindical, liderado por la Confederación General del Trabajo (CGT) que considera insuficientes los cambios y pide la retirada total.
La primera versión del proyecto de ley tradujo en la jornada de protestas multitudinaria el día 9 de este mes.
Los sindicatos desc