George A. Romero, el creador del zombi moderno y el escenario apocalíptico que lo acompaña adora todo lo que huela a Howard Hawks, que produjo este clásico al que su colega Carpenter dio un lavado de cara en La cosa.
"Fue la primera película que me dio miedo. Pasan todo el metraje abriendo puertas, puertas y más puertas. Sabes que en cualquier momento la cosa estará detrás de alguna de ellas”.
El miedo a la guerra nuclear se tradujo en los años cincuenta en una serie de científicos capaces de poner en peligro a la humanidad gracias a sus experimentos. Películas como La mosca, El hombre con rayos X en los ojos o El increíble hombre menguante son otros ejemplos de este cine de terror basado en experimentos científicos.
También puede encontrarse una velada alusión a una posible invasión soviética en cintas similares como como Ultimátum a la tierra o La invasión de los ladrones de cuerpos, en ambas los extraterrestres son mostrados como seres sin identidad propia ni sentimientos (algo de lo se atacaba al régimen de Stalin).