El Banco Popular de China está aprovechando la imparable ascensión del dólar para que su divisa se deprecie. La moneda asiática ha roto el soporte de los 6,85 yuanes por dólar y acumula en lo que va de año unas pérdidas del 5%.
Es el nivel más bajo desde diciembre de 2008. Según varios analistas financieros Pekín está aprovechando la escalada del “billete verde” para que su moneda se compre más barata y así incentivar sus exportaciones. Una medida para protegerse también de la promesa del presidente electo estadounidense, Donald Trump, de gravar el comercio exterior con China.