El presidente estadounidense, Barack Obama, está en Berlín para discutir la ampliación de las sanciones a Rusia, con sus aliados europeos. Se reunirá este viernes con los líderes del Reino Unido, Francia, Italia y España, en una cita organizada por la canciller Angela Merkel, que quiere endurecer las sanciones contra Moscú por su papel en el conflicto ucraniano y estudiar posibles nuevas sanciones por sus bombardeos en Siria.
La reunión en Berlín se produce diez días después de la victoria de Donald Trump en la carrera a la Casa Blanca y su anuncio de que va a buscar un acercamiento con Rusia.
Obama y Merkel han defendido juntos la importancia del acuerdo de libre comercio que negocian Estados Unidos y la Unión Europea y su lucha conjunta contra el cambio climático.
Obama tranquiliza a sus aliados de la OTAN
En la primera parada de su gira de despedida, Atenas, Obama intentó tranquilizar a sus aliados de la OTAN.
“En los últimos años hemos hecho inversiones históricas en la OTAN, hemos aumentado la presencia de Estados Unidos en Europa y la OTAN de hoy, la alianza más grande del mundo, es más fuerte y está más preparada que nunca. Y estoy convencido de que igual que el compromiso de Estados Unidos con la alianza transatlántica ha sobrevivido siete décadas, bajo una administración demócrata o republicana, ese compromiso continuará, incluyendo nuestra promesa y nuestra obligación de defender a todos los aliados”, dijo Obama.
En Grecia, la cuna de la democracia, Obama defendió este sistema como el mejor modelo político, pese a sus defectos. También instó a corregir el rumbo de la globalización, que ha generado, declaró, un aumento de las desigualdades.