Unos 14 millones de argentinos han dejado de vivir dignamente frente al creciente desempleo y la reducción drástica de oportunidades. La economía en Argentina cae día a día y la pobreza crece de manera alarmante, el consumo interno se ha estancado debido a la pérdida del poder adquisitivo de los ciudadanos, la cual se debe al retraso del salario con relación a la inflación, la pérdida de empleo y el aumento de las tarifas de los servicios básicos.