Los ministros de Exteriores de Alemania e Italia se suman al homenaje popular a las víctimas del atentado de Berlín.
Muchos ciudadanos han depositados flores, velas y mensajes en las inmediaciones del mercado navideño en el que se registró el ataque.
Este miércoles todos los mercadillos de la capital alemana han reabierto, tras permanecer un día cerrados en señal de respeto a las víctimas.
Está previsto que el de Breitscheidplatz, donde irrumpió un camión embistiendo a la multitud, lo haga este jueves. Un ataque que ha conmocionado al país.
“Estoy profundamente conmovido, horrorizado, aturdido y muy furioso. Furioso por una política que nos ha llevado a una situación de inseguridad, a pesar de que ya se sabía”, se lamenta este ciudadano. “Faltan pocos días para Navidad y el corazón de la sociedad alemana ha sido duramente golpeado. Esto puede desgarrar nuestra sociedad. Lo hemos visto en París, en Niza y en otras ciudades en las que ha ocurrido algo parecido. Es importante que Alemania siga siendo tan versátil y colorida y que la gente vea que todo es mejor cuando estamos juntos”, destaca este joven.
Una unidad de la que ha hecho gala este grupo de refugiados y berlineses que han unido sus voces en un coro navideño en el lugar de la masacre.