El presidente palestino ha aprovechado la ocasión para pedir que otros países sigan el ejemplo y les reconozcan como Estado. Un reconocimiento que la Santa Sede realizó en el Acuerdo Global firmado en 2015 con las autoridades palestinas y que este sábado ha quedado escenificado con la inauguración de la embajada.
“Esta embajada es un motivo de orgullo para nosotros y esperamos que todos los países del mundo reconozcan el Estado palestino, porque ese reconocimiento nos acercará al proceso de paz”, destacaba.
Abás ha mantenido un encuentro con el papa Francisco en el que han debatido sobre el proceso de paz en Oriente Próximo y han coincidido en la necesidad de reanudar las negociaciones directas entre las partes para poner fin a la violencia.
El presidente palestino ha obsequiado al pontífice con una piedra procedente del Monte del Calvario, donde se encuentra la Iglesia del Santo Sepulcro de Jerusalén.
Al despedirse, Abás ha manifestado su deseo de volver a reunirse con el papa Francisco, “quizás en Belén”.