En Colombia, la exención arancelaria, la reducción de impuestos, la liberación del tipo de cambio o los incentivos a la inversión extranjera, lejos de beneficiar a la industria nacional y al agro, han atentado contra la soberanía del país, además de que ha re-primarizado la economía, agudizando la dependencia importadora de bienes de valor agregado. teleSUR