Los gobiernos de Colombia y México, entre otros que apoyan el plan de Luis almagro, secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA) para propiciar una intervención a Venezuela por medio de la aplicación de la Carta Democrática Interamericana (CDI) cuentan con una amplia lista de cientos de presos políticos. En tanto que el de Brasil, por mencionar a otro, es actualmente un gobierno emanado de un golpe parlamentario contra la presidenta constitucional Dilma Rousseff. En Paraguay, Chile y Argentina los dirigentes campesinos y líderes políticos han denunciado persecución del Estado. teleSUR