El Congreso y las calles de Paraguay han ardido tras la votación de 25 senadores para aprobar por la vía de la enmienda un segundo mandato presidencial, prohibido por la Constitución.
Poco después de esta “oscura” votación con tan solo 25 senadores y fuera de la Cámara, la policía irrumpía en la sede de la oposición del Partido Liberal matando al joven de 25 años Rodrigo Quintana. Manifestaciones populares en repulsa por este intento de perpetuar en el poder a los líderes de los dos partidos que se alternan el gobierno en Paraguay comenzaron a reproducirse en distintos puntos.
Las protestas más violentas se iniciaron en la Plaza de Armas, junto al Congreso paraguayo. El edificio fue asaltado e incendiado. Los bomberos sofocaron el incendio en el Congreso, pero las calles de la capital paraguaya comenzaron a registrar más manifestaciones y disturbios que fueron respondidos con cargas policiales, pelotas de goma, gases lacrimógenos y la intervención de la policía montada contra la población. Además del joven muerto, hay centenares de heridos y más de 200 detenidos.