Cuando la pitbull abandonada llamada Rainbow tuvo cachorros, trató desesperadamente de protegerlos de la vida en las calles, pero sólo 48 horas después de dar a luz, una enorme tormenta golpeó California, y Rainbow y sus cachorros estaban en peligro. Pero fue entonces cuando los integrantes de Hope For Paws se enteraron de la pequeña familia, y condujeron tres horas y media para tratar de ayudarlos.
Era completamente de noche cuando el equipo de rescate llegó, y era difícil de localizar a Rainbow y sus cachorros inmediatamente, ella estaba escondida en algún lugar entre los arbustos gruesos.
Afortunadamente encontraron a todos acurrucados juntos en una especie de cueva entre los arbustos, Rainbow tratando como podía de mantener a sus bebés calientes.
En los últimos meses, los habitantes de la zona habían estado tratando de rescatar a Rainbow, pero ella siempre se asustaba y huía. Pero cuando tuvo a sus cachorros y al tener que protegerlos, ella pareció darse cuenta de que necesitaba ayuda.
Eldad se deslizó a través de los arbustos para llegar a Rainbow. Ella tenía un montón de espacio para correr, pero en su lugar, optó por enfrentarse a sus miedos y quedarse con sus bebés. Eldad esperó un poco de tiempo para ganarse la confianza de Rainbow, le dio de comer y finalmente intentó coger al primer bebé.
Tan pronto como Eldad levantó al bebé, Rainbow comenzó a lamer al pequeño cachorro, como si quisiera decirle que estaría bien. Uno por uno, Eldad sacó a los cachorros que estaban debajo de la madre, y uno a uno ella besó, mientras observaba que se los llevaban.
Cuando ya sólo faltaba un bebé, Rainbow empezó a sentarse, como si supiera que ahora que todos sus hijos estaban a salvo, era el momento en que ella iba a ser rescatada también.
Eldad tiró suavemente de Rainbow y la sacó de los arbustos, luego la llevaron a ella y sus cachorros a un lugar seguro.
Los cachorros fueron llamados: Thunder, Breezy, Misty, Raindrop, Flash, Bolt, Stormy y Droplet.
Rainbow y sus cachorros fueron llevados a hogares de acogida. Los pequeños ya crecieron y encontraron a sus familias para siempre.