En Italia, los 46 acusados del caso “Mafia Capital” han sido condenados este jueves a penas de entre 6 y 20 años de cárcel.
Entre los condenados se encuentran Massimo Carminati, antiguo terrorista de extrema derecha condenado ya en el pasado por su relación con la mafia de Roma, y su brazo derecho, el empresario Salvatore Buzzi.
“Durante casi tres años se dijo que Buzzi era un mafioso y hoy, por fin, se ha hablado claro: el tribunal ha dicho que no es así”, explica Alessandro Diddi, abogado de Salvatore Buzzi
De hecho, la penas fueron inferiores a las que pidió la fiscalía ya que el tribunal consideró la asociación criminal pero desestimó la acusación mafiosa.
La detención de Carminati en 2014 y las investigaciones de la policía mostraron la existencia de una red criminal en Roma cuyos tentáculos habían llegado a todos los niveles del ayuntamiento y entre responsables políticos tanto de izquierdas como de derechas para manipular la gestión de contratas.
La prensa italiana bautizó entonces esa red como “Mafia Capital” y se habló desde el primer momento de una asociación que operaba como las mafias del sur de Italia; la Camorra, la Cosa Nostra o la N’Dranghetta.