Herzliya Pituaj (Israel), 12 sep (EFE).- (Imagen: Maya Siminovich) Yosef Maiman, empresario y multimillonario israelo-peruano, sospechoso en los casos de Ecoteva y Odebrecht de haber ayudado al expresidente de Perú Alejandro Toledo a lavar fondos, habla en exclusiva a Efe del deterioro de su relación y de cómo se sintió "utilizado".
"Yo saqué el pecho por Toledo y me equivoqué", reflexiona en su salón en esta localidad costera israelí, en relación a su asunción de responsabilidades en el caso Ecoteva cuando surgió hace cuatro años.
"Se me utilizó. Cometí el error de salir a ayudar a un amigo", algo que siente que a la larga le perjudicó, "entre otras cosas porque (Toledo) venía con múltiples versiones, no necesariamente ajustadas a la realidad".
El hecho de que el expresidente respondiese al escándalo señalando a Maiman como receptor del dinero -veinte millones de dólares que supuestamente Odebrecht entregó a cambio de la concesión de tramos de la carretera Interoceánica Sur- derivó en la ruptura de una amistad que había durado cerca de cinco décadas.
"Cuando surgen todos estos problemas, yo por momentos me siento una mezcla de desilusionado y un poquito utilizado. Y causó que las relaciones comiencen a estropearse", argumenta el empresario, quien repite que su intención en todo momento "fue tratar de ayudar al amigo".
"La línea de ellos es: Háblenle a Maiman. Y, yo no estuve en el colegio, profesora, yo no rompí el vidrio, no vine ese día, lo cual no necesariamente reflejaba quién tomó la piedra y quién rompió el vidrio" afirma, midiendo sus palabras para defenderse sin acusar.
En estos momentos no mantiene comunicación con el antiguo amigo y cree que "está un poco preocupado" por su declaración a la Fiscalía, con quien ha llegado a un acuerdo de colaboración eficaz.
"Hay un silencio por las dos partes, evidentemente estamos ya en una situación potencial de conflicto. Di testimonio en Perú solo una vez y saqué el pecho por él, lo cual no necesariamente fue una decisión sabia. Pero no quiero entrar en detalles, voy a testificar cuando llegue a juicio, si se me invita, y asumo que se me va a invitar", agrega.
Toledo, añade, "era el centro del huracán, toda la artillería estaba contra él, trató de defenderse como pudo y evidentemente entre los platos rotos, acabaron rompiendo partes de mi plato. No quiero prejuzgar, cada persona reacciona distinto a la presión; yo lamento que una relación de tantos años se haya venido abajo".
"Creo que lo que Alejandro debería hacer, que no se si en algún momento le han ofrecido, es volver a Perú, con la garantía de que podrá defenderse desde su casa y no desde la cárcel", bajo una prisión preventiva que no le parece "ni razonable, ni que de dignidad al Perú".
"Lo que le da dignidad al sistema judicial es que haya un juicio" y si tiene que haber una condena, que se imponga, manifestó.
Maiman rememora su relación con Toledo, que comenzó hace ya medio siglo, cuando ambos