La orden de la fiscalía española de precintar los colegios electorales para el referéndum del gobierno catalán el 1 de octubre choca con la posición de los Mossos d’Esquadra y la misma comunidad educativa. El mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, alertó en una reunión con la Policía Nacional y la Guardia Civil que esta orden “puede comportar consecuencias no deseadas” en el orden público.

El compliment d’instruccions no exclou la responsabilitat professional de contemplar q aplicar-les pot comportar conseqüències no desitjades— Mossos (@mossos) 27 de setembre de 2017


En esta tensión entre los mandos españoles y catalanes, asociaciones de maestros, alumnos, padres y trabajadores se han organizado para hacer posible que los centros educativos elegidos por la Generalitat estén abiertos el domingo.

“Los directores de estos centros han recibido una advetencia donde se les explica los delitos en los que pueden incurrir si facilitan, fomentan o colaboran en un acto tan delictivo como votar”, denunció a Euronews el presidente de la Agrupación Escolar Catalana, Oriol Blancher.

La iniciativa ‘Abramos las escuelas’ (Obrim les escoles) ha puesto en marcha una web para coordinarse y que sirve como manual a los voluntarios que quieran participar en el proceso de apertura de los colegios.

“Estoy a favor de que se vote, pero lo ideal sería que se pudiera hacer con normalidad y que, por lo tanto, pudieran haber debates e información a favor y en contra de la independencia”, consideró por su parte la profesora de biología Víctoría García. “Algún profesor también manifiesta que no está de acuerdo con que se vote. Bueno, somos la Cataluña diversa y plural y es normal que haya diferentes opiniones”.

Por su lado, el consejero catalán de Sanidad Antoni Comín ha asumido personalmente la responsabilidad de los ambulatorios habilitados como colegios electorales destituyendo a los presidentes de los consorcios sanitarios.