Al abrir la puerta de una de las cinco sucursales de la Barbería do Zé en Río de Janeiro, el recorrido es un viaje en la máquina del tiempo. Ambiente retro, barberos de tirantes y boina, sillas de cuero y una decoración que nos lleva a la década de los 30, cuando nació el abuelo de Thiago, Zé, uno de los socios fundadores.
Thiago Reis junto Hugo Paiva, amigos de infancia y socios de esta idea emprendedora que ha cautivado a buena parte de la población masculina carioca, comenzaron estudiando el mercado en 2003. Thiago viajó a varios países y comenzaron a pensar en el concepto para convertirse en una barbería diferenciada. Es decir, no solo un lugar donde cortarse el pelo y arreglarse la barba, sino un lugar de encuentro donde el hombre pueda encontrar todo tipo de servicios sin moverse del mismo área y además disfrutar de una cerveza o un juego con los amigos.
El proyecto arquitectónico también nació de Thiago que como arquitecto quiso diseñar cada una de las sucursales con las que cuenta la Barbería do Zé.
En 2015 abrieron su primera sucursal en Miér, uno de los barrios de la periferia de Río de los que Thiago y Hugo son vecinos. Desde entonces y hasta ahora han visto crecer su negocio como la espuma. Al ver su éxito muchos se interesaron por el negocio, por lo que decidieron montar una empresa para poder tener franquiciados. Hoy cuentan con cinco sucursales en distintos barrios de la ciudad y está prevista la apertura de una sexta a final de este año inicio del próximo. Inclusive, piensan en atravesar fronteras y ya están pensando en mercados internacionales como Portugal o España.
La clave de su éxito, es un servicio diferenciado e integrado en un mismo espacio. Sin salir de la barbería, los clientes pueden probar una de las cuarenta cervezas que ofrecen en la carta, tomar un aperitivo, jugar al póker o al billar, comprar ropa o productos para baba y cabello, hacerse un tatuaje y hasta usar la parrilla para disfrutar de una carne que en breve podrán comprar hasta en la propia barbería a través de un acuerdo que han cerrado con una de las empresas cárnicas de Río.