La crisis económica que afecta a Venezuela se ha instalado en los estados agrícolas del país y un rubro que se encuentra sumamente afectado es el del café.
Aunque el café venezolano es uno de los mejores del mundo, la falta de fertilizantes y agroquímicos, pone en riesgo la producción cafetalera que no tiene prioridad para el Estado Venezolano.
En este sentido, Damelys Colmenares y Arnaldo Barrios, caficultores del Estado Portuguesa, en el Centro de Venezuela explican a HispanoPost todas las dificultades que deben atravesar para poder llevar el producto hasta los consumidores.
La falta de efectivo, la escasez de combustible y sobre todo la falta del apoyo gubernamental, hacen que los caficultores ofrezcan su cosecha a Dios, para poder obtener algún tipo de beneficio.
Juan Carlos Salas