Los perros han acompañado al ser humano desde hace al menos 15.000 años. Gracias a la ciencia, sabemos que hace cientos de miles de años, los humanos caminaron al lado del antepasado del perro doméstico, una especie extinta del lobo. Según una investigación de la Universidad de Linköping (Suecia), el origen de esta amistad con las habilidades sociales que conlleva tiene una base genética. Los expertos identificaron cinco genes relacionados que en el ser humano están vinculados a trastornos del comportamiento, como el autismo o la esquizofrenia.