Después de jugar unas horas a Trials Rising (la enésima entrega de la saga desarrollada por RedLynx y Ubisoft) hemos comprobado que los circuitos imposibles, las acrobacias y los saltos siguen siendo igual de divertidos. ¡No nos bajamos de la moto! Los fundamentos del juego son sólidos como una roca, aunque ya han pasado 10 años desde el primer Trials HD; se trata de resolver una serie de pistas de obstáculos, a lo Jordi Tarrés o Marc Colomer, casi como si se tratase de un puzle (heredero del clásico Excitebike).
Es un rompecabezas porque no podemos cambiar la dirección, sino desplazar el peso -sobre la rueda delantera o sobre la tracción- y controlar el acelerador y el freno. Las primeras carreras son sencillas, pero la cosa se va complicando con la inclusión de elementos móviles, looping, trampolines... que desafían nuestra habilidad. Trials Rising, que será la primera entrega que llegue simultáneamente a PS4, Xbox One, PC y Nintendo Switch (será el próximo 26 de febrero), apuesta por un modo carrera muy completo.
Tendremos que pilotar en localizaciones reales de todo el mundo -desde la torre Eiffel al monte Everest- y desbloquear diferentes ligas. Cada una de estas divisiones termina con una gran final, que podrá a prueba todo lo que hemos aprendido. ¿Termina? Bueno, no exactamente, porque si estamos conectados online, podremos comprobar qué pilotos han mejorado nuestros tiempos en cada nivel y correr contra su "fantasma" para recuperarlo.
Este mapa del mundo está constantemente en movimiento, y siempre tendremos nuevos desafíos que atender. Y si nuestros amigos juegan en una plataforma diferente, no hay problema, porque los tiempos que se consiguen en el circuito son "cross platform".
Pero no sólo de trofeos viven los piloto, ¿verdad? Por eso además de las competiciones regulares, tendremos que hacer pruebas específicas para conseguir contratos de patrocinadores. Más sponsor significa más dinero, con que comprar mejores motos, piezas y nuevos aspectos para nuestro piloto.
Cuando decimos que la creatividad es una de las partes fundamentales de Trials Rising, no sólo nos referimos a las locuras que se pueden hacer sobre la moto. El juego incluye un potentísimo editor de circuitos. De hecho, según nos ha comentado Nacho Arias (productor asociado en RedLynx que se ha encargado de la presentación) se trata de la misma herramienta que se utiliza para crear los circuitos del juego. Gracias a un completo interfaz, podemos escoger una localización y colocar obstáculos y elementos decorativos (hay objetos pertenecientes a todas las entregas de la saga), modificar la cámara o establecer checkpoints...
Una vez que hayamos terminado nuestra "obra maestra" podemos compartirla con jugadores de todo el mundo. Y lo mismo ocurre con nuestras creaciones cosméticas para motos y piloto. Podemos cambiar el diseño de las piezas, modificar la ropa y las protecciones del piloto, y desbloquear elementos adicionales.