Las agresiones le han dejado a Kamal el ojo hinchado y amoratado. Todo ocurrió en un colegio de Barcelona. El padre de un compañero de clase de Kamal irrumpió en el colegio armado con un martillo y preguntando a voces donde estaba "el puto moro de mierda" que había agredido a su hijo. Buscaba a Kamal, que se había peleado con el hijo del agresor después de que, presuntamente, este le insultara por ser marroquí. El hombre consiguió golpearle, pero acabó siendo reducidio por los propios compañeros de clase de Kamal. Ahora el joven marroquí dice tener miedo de salir a la calle por si van a buscarle. El agresor por su parte ha sido condenado a 16 meses de prisión, que no cumplirá por no tener antecedentes, y a una indemnización de 565 euros. Kamal, mientras, espera a ver cómo evoluciona el desprendimiento de retina que le provocaron los golpes y que, a lo peor, podrían costarle la visión del ojo herido.