La cocina ya ha golpeado las puertas de la Unesco para convertirse en Patrimonio de la Humanidad, una categoría que pueden estrenar los creadores de la cocina moderna. La gastronomía francesa va a presentar su candidatura en apenas 5 días y con el respaldo de la mayoría de los grandes chefs galos. Pero la candidatura francesa no será la única. La cocina española también se convertirá en aspirante a principios del año que viene.