Decenas de personas participaron ayer en Blockworth en la carrera más loca y extraña de las que se celebran en Reino Unido: perseguir un queso lanzado por una colina muy inclinada. La carrera tiene tanto éxito que, en esta edición, han participado ciudadanos de los cinco continentes y más de 3.000 personas se han agolpado para ver los golpes de los deportistas. Por supuesto, vence el primero en alcanzar el queso.