Un estudio encargado por el Defensor del Menor carga sobre los padres la responsabilidad de que sus hijos estén poco o mal informados sobre el consumo de drogas. Además, el estudio afirma que uno de cada cinco niños menores de 12 años ya ha probado el alcohol. Son pocos los adolescentes que sabe lo que es el alcohol, la cocaína, los porros o las pastillas por sus padres. La televisión y los amigos suplen lo que los adultos no hacen. Aunque hay padres que se esfuerzan. El Defensor del Menor responsabiliza a los padres de olvidar su función educativa y, con ello, de no evitar el consumo de sustancias tóxicas a los menores.